Eso es lo que hizo el power-trio de San Francisco con el clásico de Eddie Cochran. Cambió la ordenación melódica y le metió tal chute de tempestuosa electricidad que su lectura está considerada como una de las canciones más influyentes dentro de la escena metal cuya influencia ha llegado hasta la actualidad dentro de las bandas stoner y al revival setentero. (Manel Celeiro, ‘Cancionero del 68’ Ruta 66)
SUMMERTIME BLUES (Blue Cheer, 1968)
Una de esas adaptaciones que dan la vuelta totalmente a la composición original para transformarse en una canción prácticamente nueva.
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