Oriundo de Detroit, y apodado ‘Mr. Excitement’ por su tórrida puesta en escena, sus primeros hits fueron obra de su compañero de ring Berry Gordy Jr., al que no pudo seguir en su triunfante aventura Motown por un contrato vitalicio con el poderoso sello neoyorquino Brunswick. Una discográfica que vivió desde finales de los 50 hasta la segunda mitad de los 60 por, para y gracias a Wilson y sus hits ‘Lonely Teardrops’, ‘You Better Know It’, ‘Baby Workout’, ‘Whispers’, ‘Higher and Higher’, ‘I Get the Sweetest Feeling’, ‘(I Can Feel These Vibrations) This Love is For Real’… En su breve vida (1934-1984), además de ser una de las grandes voces de la música del alma, Wilson fue un follardín pendenciero y gamberro, adicto a muchas de esas cosas que te truncan la vida antes de tiempo. Tras sufrir un infarto a mitad de un concierto pasó sus últimos nueve años de ‘vida’ en estado vegetativo conectado a una máquina. Su música es algo inmenso, increíble e imperecedero. (Extraído de MODS. Guía para una vida elegante, Dani Llabrés, Lenoir Ediciones)
JACKIE WILSON
Jackie fue el tercer intento. Sus dos precedentes hermanos habían muerto nada más nacer. Eso tal vez explique la fuerza vital que su voz fue capaz de dotar a un irresistible repertorio del mejor R&B y soul con eventuales escalas en el góspel.
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